Decidida a convertirse en Musa, Lola - Laura Esquivel - (17) deberá dejar el Olimpo para cumplir su prueba final de graduación: inspirar a un músico que ya no puede componer. Durante los 3 meses de prueba, no solo su talento y poder musical estarán a prueba, también su confianza en sí misma. Porque Lola es muy buena, pero también es tímida y vergonzosa… y qué mejor que un inspirado como Tiago!
Tiago Puccini - Andrés Gil - (18) es el líder de Los Millenials, una banda pop con gran potencial. Aunque no pueda verlo, es arrogante, haragán y sabe disfrazar la verdad. Por eso se cree y hace creer a los demás que tiene todo bajo control, pero en realidad no tiene ni una canción nueva para el concurso que puede acercarlos a su gran sueño. Por más que Lola insista, Tiago jamás aceptaría su ayuda, quien es esta loca que dice ser una musa?
La vida de Tiago es un remolino: Gala (18), su amigovia e hija del manager de su banda, es extremadamente caprichosa y celosa. Además, quiere ser cantante y canta mal. Santiago (Juan Darthés), su papá, un músico frustrado tras el fallecimiento de su mujer, es perseguido por grandes deudas y debe refugiarse en casa de Tiago con sus dos hermanos menores, Julián (12) y Nina (12), mellizos totalmente diferentes.
Lola se irá dando cuenta que inspirar no es sólo poner las notas en el papel, y que seguir las reglas del Código Musal no resulta tan fácil. El código, que rige la actividad de las musas en la Tierra, no permite que los humanos sepan que una musa es una musa excepto, claro, el inspirado, pero quien en el caso de Lola se rehúsa a aceptar que ella tiene poderes. Éstos no pueden usarse para otra cosa que no sea la misión. Y mucho menos puede enamorarse de un humano.
Con Gala 24/7 pendiente de la nueva “asistente” de Tiago, Lola estará al borde de ser descubierta. Los mellizos, que están comenzando una etapa de cambios, hacen que Lola quiera ayudarlos con sus poderes. Y Santiago, quien actúa de su padre en la Tierra, necesita un nuevo amor. Pero por sobre todo, lo que hace poner en jaque su misión es Tiago mismo: no solo no quiere componer sino que se enamora de él. Por suerte está Clío (19), su hermana y musa de las artes plásticas, que vino a acompañarla. Son grandes amigas y confidentes y es la única que realmente puede ayudarla, aunque a veces también sienta un deseo irrefrenable de cerrarle la boca a alguien!
La misión de Lola tiene un vencimiento: sólo tres meses para lograr que su inspirado alcance el éxito. Pero además, se ve cumplimentada si el artista en cuestión, es decir, el arrogante de Tiago, no es soberbio.
¿Podrá Lola convertir a este pobre terreno, arrogante y egocéntrico, en un artista de buenos modales? ¿Y si lo lograra, podrá dejarlo y volver al Olimpo sin llorar por amor?
Queda en manos de Lola decidir qué hacer, haciendo caso a su deber, o a su corazón.
La misión de Lola tiene un vencimiento: sólo tres meses para lograr que su inspirado alcance el éxito. Pero además, se ve cumplimentada si el artista en cuestión, es decir, el arrogante de Tiago, no es soberbio.
¿Podrá Lola convertir a este pobre terreno, arrogante y egocéntrico, en un artista de buenos modales? ¿Y si lo lograra, podrá dejarlo y volver al Olimpo sin llorar por amor?
Queda en manos de Lola decidir qué hacer, haciendo caso a su deber, o a su corazón.
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